Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) son la herramienta fundamental para planificar y distribuir los recursos públicos. Su tramitación parlamentaria comienza con la presentación del proyecto de ley por parte del Gobierno y continúa con su análisis en el Congreso y el Senado.
El primer paso del proceso es la celebración de comparecencias de altos cargos de la administración, que explican las partidas presupuestarias. Luego se celebra el debate de totalidad. Durante este debate, se analizan las líneas generales del presupuesto y se puede rechazar la propuesta inicial, obligando a una reformulación. En caso de aprobarse, el texto pasa a la Comisión de Presupuestos para el estudio detallado de las cifras y de las enmiendas, por lo que las Cámaras pueden modificar las cuentas antes de su aprobación definitiva.
En su paso por el Senado se someten a una segunda lectura, donde se pueden presentar nuevas enmiendas o modificaciones, e incluso vetar el proyecto de ley. Finalmente, tras la aprobación, los Presupuestos son sancionados y publicados para su entrada en vigor.
Este procedimiento garantiza el control democrático del gasto público y la transparencia en la gestión financiera del Estado. Si los presupuestos no se aprueban a tiempo, se prorrogan automáticamente los del ejercicio anterior, asegurando la continuidad de la actividad administrativa y económica del país.
Con esta infografía recorrerás, paso a paso y de forma clara y visual, el procedimiento de tramitación parlamentaria de los presupuestos. Este proceso garantiza la transparencia, la participación parlamentaria y el control democrático sobre la gestión económica del Estado y de las políticas públicas.
